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Un grato paso adelante para la clase trabajadora pakistaní y mundial

Por Keith Jones
29 Enero 2011

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La World Socialist Web Site (WSWS)—el sitio web socialista mundial—ha publicado la declaración de Voz Marxista, un grupo pakistaní que ha expresado su acuerdo político con las perspectivas del Comité Internacional de la Cuarta Internacional (CICI) y ha asumido la tarea de trabajar con éste para construirlo como el Partido Mundial de la Revolución Socialista en Pakistán.

Damos una grata bienvenida a esta declaración. Representa un avance importante en la elaboración de una perspectiva revolucionaria e indica un desarrollo político dentro de la clase trabajadora en Pakistán.

La completa incompatibilidad del dominio burgués con las aspiraciones democráticas y sociales de los obreros y trabajadores de Asia del Sur está hoy más visible que nunca. Seis décadas después que las aspirantes burguesías nacionales de India y Pakistán unieran se unieran con el imperialismo británico para reprimir la revolución anti-imperialista y dividieran el subcontinente Indio bajo fronteras comunales (communal lines), la región de Asia del Sur es el lugar del mundo donde se concentra la mayor cantidad de gente desnutrida y empobrecida.

Al igual que la dictadura apoyada por los EE.UU. del general Pervez Musharraf que le precedió, el actual gobierno de Pakistán liderado por el Partido Popular de Pakistán (PPP) está imponiendo brutales medidas de austeridad a instancias del Fondo Monetario Internacional, una institución dominada por los EE.UU. y los países occidentales. En cuanto al tan promocionado ascenso económico de India, el surgimiento de multinacionales con sede en la India y de un grupo de multimillonarios indios se basa en la miseria de la mayoría de la población rural y la emergencia de una clase trabajadora salvajemente explotada.
Siendo incapaz de ofrecer cualquier solución progresiva a los problemas de las masas, las burguesías indias y pakistaníes buscan desviar las tensiones sociales a través de su reaccionaria rivalidad geopolítica entre estados y avivando las divisiones religiosas-comunales, nacionales-étnicas y de castas.

Ambos Islamabad y Nueva Delhi están entusiastamente compitiendo por el favor de Washington.

Todas las secciones de la burguesía pakistaní –desde los partidos fundamentalistas islámicos al PPP- están servilmente colaborando con el imperialismo estadounidense en su guerra en Afganistán. Esto incluye lanzar desde Pakistán ataques de aviones teledirigidos, los cuales han matado a cientos de civiles, e involucrar con una cruel indiferencia a los derechos democráticos y a la vida de los civiles al ejército pakistaní para que reprima a las milicias que colaboran con los talibanes que se encuentran al alrededor del territorio tribal Pashtún.

Mientras tanto, India, el otrora campeón de la política del movimiento de los No Alineados se acoge aún más a los planes de Washington de contener a China, al aceptar codiciosamente los ofrecimientos de ayuda por parte de los EE.UU. con la aspiración de convertirse en una potencia mundial.

Como la declaración de Voz Marxista atestigua: en Asia del Sur los trabajadores con mayor conciencia de clase y los jóvenes e intelectuales de mentalidad socialista han comenzado a reconocer la necesidad de revivir una perspectiva marxista por medio de un viraje al trotskismo.

Por décadas, la clase trabajadora en Asia del Sur ha sido políticamente sofocada por los partidos estalinistas. Los estalinistas han subordinado de manera sistemática a la clase trabajadora con una u otra sección de la burguesía nacional, con resultados ruinosos, bajo el pretexto de que los problemas no resueltos de la revolución democrática—incluyendo la erradicación del dominio de latifundios, el sistema de castas y el establecimiento de una verdadera igualdad entre las miríadas de pueblos del subcontinente indio—es posible sólo por medio de una revolución “nacional” liderada por la burguesía.

La declaración de Voz Marxista, basada en una reseña de las esenciales experiencias estratégicas de la clase trabajadora en Asia del Sur e inspiradas en las lecciones de las luchas políticas lideradas por el CICI, demuestra la necesidad de que los trabajadores paquistaníes fundamenten sus luchas en la estrategia de la revolución permanente.

“Las tareas de la revolución democrática”, declara Voz Marxista, “serán realizadas en Pakistán y en Asia del Sur no por la burguesía, ni en alianza con ella o con cualquiera de sus secciones, sino en la revolucionaria lucha en contra de la burguesía y el orden social capitalista. La clase trabajadora emergerá como el liberador de las masas oprimidas y como el líder de una alianza revolucionaria entre la clase trabajadora y el campesinado solamente a través de una incesante lucha para liberar a las masas de la influencia política de la burguesía, al exponer su subordinación al imperialismo, su indiferencia a las aspiraciones democráticas de las masas y su venal persecución de sus intereses de clase. Un gobierno obrero y campesino combinará medidas revolucionarias democráticas, entre lo más importante una transformación radical de relaciones de la tierra, con la expropiación de las grandes corporaciones y otras medidas socialistas, colocando en el corazón de su estrategia la lucha para movilizar la clase trabajadora mundial para que ponga un fin al capitalismo”.

La declaración de Voz Marxista rechaza todas las formas de nacionalismo y políticas nacionalistas y comunalistas, incluyendo la reaccionaria ideología comunal consagrada en la partición de la India y Pakistán como estados rivales, así como las de aquellas fuerzas que abogan por la ruptura de Pakistán a lo largo de líneas étnico-nacionales.

Condena el Islamismo y las políticas reaccionarias del terrorismo, mientras que coloca como una tarea central la movilización política independiente de la clase trabajadora en contra de la guerra Af-Pak y por el aplastamiento de la estratégica alianza militar entre Islamabad y Washington.

Y por último, la declaración de Voz Marxista insiste en la crucial importancia de basar la lucha por la construcción de un partido revolucionario de la clase trabajadora pakistaní en las lecciones de la implacable lucha del CICI contra el oportunismo pablista. Provee una resumida, pero reveladora, exposición del daño político causado por La Lucha (de la Corriente Marxista Internacional), el Partido de los Trabajadores de Pakistán (que está aliado con el Nuevo Partido Anti-Capitalista francés) y otros grupos pablistas. Estos grupos funcionan dentro de la órbita política y, en un grado u otro, están alineados con el burgués Partido Popular Pakistaní, varios movimientos étnicos-nacionalistas, los sindicatos y ONGs alineadas con el Foro Social Mundial.

La WSWS hace un llamado a nuestros lectores en Pakistán, Asia del Sur y alrededor del mundo para que estudien cuidadosamente la declaración de Voz Marxista y contribuyan a la discusión de las perspectivas y del programa que guiará a la construcción de un partido socialista revolucionario de la clase trabajadora pakistaní mediante el envío de sus comentarios y preguntas.

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